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El Metaverso quizás para algunos suene a un género literario, pero no lo es. Está relacionado con la ciencia ficción y últimamente más de uno habrá leído o escuchado esta palabra, que no es un concepto nuevo, al menos en el mundo virtual.
Existen grandes cantidades de “mundos virtuales”, sobre todo en los videojuegos, en los cuales es posible crear personajes o avatares y vivir experiencias o aventuras a través de una computadora o celular. Pero en este caso, el Metaverso no busca ser un mundo de fantasía, sino una especie de realidad alternativa en la que se podrá hacer las mismas cosas que se realizan fuera de la casa, pero sin movernos de ella.
Primeramente trataremos de entender el concepto de Metaverso. El término proviene de una novela de 1992 llamada Snow Crash de ciencia ficción, escrita por Neal Stephenson. Es una palabra que se ha asentado para describir visiones de espacios de trabajos tridimensionales o virtuales, siendo así un mundo virtual en el que se podrá interactuar, considerando que ha sido creado para replicar el mundo real en el mundo virtual
La idea de Metaverso es acceder a este nuevo mundo irreal utilizando una serie de dispositivos que trasladarán a los sentidos hacia lo virtual haciéndolo parecer que realmente se está dentro del mismo pudiendo interactuar con todos sus elementos. Será como teletransportarse a un nuevo mundo a través de anteojos de realidad virtual y otros complementos.
Para grandes empresas como Facebook, hoy “Meta”, Google, Microsoft, entre otras, el Metaverso es visto como un gran abanico de oportunidades de negocio que moverá millones de dólares, ya que podría ser utilizada como una plataforma en la cual emprendedores, empresarios o todo aquel que insertarse en él, tendrá la posibilidad de crear una empresa, una unidad de negocio, un emprendimiento o lo que sea de ocurrencia, en el mundo virtual.
Esta “creación” permitirá desenvolverse y desarrollarse con confecciones estéticas de avatares, los cuales podrán interactuar con otros avatares que representarán a personas transportadas del mundo real al virtual, generar reuniones de trabajo, de socialización, networking, visualización de productos, pruebas, un sinfín de actividades, las mismas que se desarrollan en el mundo real y cotidiano de todas las personas.
El Metaverso también tiene pensado manejar su propia economía virtual, se estima que, como será una réplica del mundo real, en caso de querer asistir a un concierto por ejemplo, o tomar un café, desear cambiar la ropa del avatar creado, podría tener un costo y generar micropagos dentro de la plataforma virtual.
De cualquier forma, todo lo mencionado es una proyección, una idea de aplicación en un futuro, quizás a corto o largo plazo, pero de concretarse, será un interesante y gran salto hacia la revolución tecnológica en este sigo XXI y según como se lo mire, podrá generar o no grandes avances hacia un mundo de interconexiones digitales entre los seres humanos… pero, ¿afectaría de algún modo las relaciones interpersonales?